Un ancla es un dispositivo que se utiliza para evitar que un barco se desvíe debido al viento o las corrientes. Además, las anclas también pueden actuar como mecanismos de arrastre positivo durante las tormentas proporcionando una fuerza restauradora que mantiene la embarcación estable y evita que la proa golpee o se inunde debido a la carga de agua durante condiciones inestables.
El peso de un ancla es función del Numeral de Equipo (valor que depende del desplazamiento y diferentes medidas del buque) puede oscilar desde 180 Kg., a 30 Tn (aproximadamente lo mismo que un buque pesquero de 10 metros).
El ancla tipo Hall (ver imagen) es la más utilizada en la actualidad: es un ancla con brazos articulados, pueden formar un ángulo de unos 30º con respecto a la caña. La cabeza o bloque principal del ancla tiene un peso que es las tres quintas partes del total. Cuando ésta se lanza al estar el buque navegando a una cierta velocidad, la articulación que tiene permite que se clave en el sedimento manteniendo el barco en su lugar. El peso y la forma del ancla puede resistir fuerzas significativas.
Cuando el barco necesita moverse, ésta se levanta del fondo del mar usando el molinete de anclas. Este proceso puede ser un desafío, especialmente si el ancla se ha hundido profundamente.
Uno de los casos más recientes en los cuales el ancla salvo un buque se dio en 2018 cuando el crucero noruego Viking Sky experimentó una falla en el motor durante una tormenta en la costa de Noruega. El barco, que transportaba a más de 1.300 pasajeros y tripulantes, perdió potencia y comenzó a derivar hacia la costa rocosa. La tripulación desplegó rápidamente las anclas del barco en un intento de frenar su deriva y evitar que encallara. Las anclas ayudaron a evitar que los fuertes vientos y las olas lo empujaran contra las rocas a la vez que permitieron mantenerlo estable.
La tripulación y los equipos de rescate finalmente pudieron evacuar a todos los pasajeros del barco utilizando helicópteros y otras embarcaciones. El uso de las anclas desempeñó un papel crucial en la prevención de una situación potencialmente catastrófica y en ganar tiempo para los esfuerzos de evacuación.